lunes, 29 de abril de 2013

Apostamos uno de 500


Si usted fuera líder de un partido político que está gobernando… ¿qué haría si la gente ya no le votara por lo que ha hecho? ¿Y si, estando ya en la oposición, cada vez menos gente tuviera intención de votarle? ¿Y si usted le dijera a la gente que, en caso de gobernar otra vez, haría justo lo contrario de lo que hizo gobernando… y aún así cada vez menos gente confiara en usted? Difícil solucionarlo, ¿eh? Bueno, sí, hay una solución: dejar de ser un líder político y marcharse a su casa y dedicarse a otra cosa. Pero no, resulta que usted insiste en seguir dirigiendo el partido, y la mayoría de sus militantes van y le apoyan de nuevo para que sea secretario general.

Pero la gente confía cada vez menos y menos y menos en usted y en su partido, y usted, de los nervios, ya no sabe qué conejo sacar de la chistera para engatusar a la ciudadanía. Y se dedica a copiar ideas de otros partidos políticos… por ejemplo, su última ocurrencia: si un partido (por ejemplo, Izquierda Unida) propuso hace justo ahora cuatro años cambiar el color de los billetes de 500 euros para que todo ese papel moneda tuviera que pasar de nuevo por el control de Hacienda, y su actitud entonces, cuando estaba gobernando, osciló entre la sonrisa, el silencio y el desprecio… ahora va y le copia la idea y dice que hay que cambiar todos los billetes de 500… y las redes sociales y la prensa y todo bicho viviente se ríe de su originalidad.

Y así, cual loco hincha futbolero que aparentara-solo aparentara, porque usted tiene sus principios- cambiarse la camiseta del Barcelona por la del Madrid o viceversa, va usted pregonando que ahora hay que hacer lo contrario de lo que hizo, que hay que hacer lo que otros partidos de izquierda vienen diciendo desde hace años. Pero, aún así, la gente se sigue apartando de usted, lo mira de reojo, le vuelve la espalda, se aleja de usted… ¿qué haría usted entonces? Y, sobre todo, ¿qué debería hacer su partido?

Pues… no lo sabremos, porque su responsable de organización, Elena Valenciano (¡vaya, hemos descubierto que usted es Rubalcaba, qué fallo tan tonto!), ha dicho el pasado lunes que “Ni el PSOE, ni el PP, ni la Coca-Cola, ni Nestlé, ni El Corte Inglés, destapan sus estrategias en público años antes de que vayan a celebrarse las cosas”. Toma ya, al PSOE le gusta ser como el PP (partido que no cumple con lo que dijo a sus votantes) y como las grandes empresas (algunas acusadas de cosas muy muy sucias en España y en el resto del planeta). ¡Esa, esa es la líder y estratega que necesita el PSOE para los próximos años! ¡Toma ya debate de ideas! Las ideas y la estrategia y todas esas “cosas”, todas a buen recaudo… ¡viva la transparencia y el debate abierto a la sociedad!

De verdad, Rubalcaba, váyase a casa tranquilo, tómese una Coca-Cola mordisqueando una chocolatina de Nestlé mientras lee un folleto de viajes El Corte Inglés… y respire de una vez: Elena Valenciano lo solucionará todo, para eso la apoyan sus compañeros de partido. Y si alguna vez vemos un billete de quinientos, lo apostaremos por ella… a no ser que ese rojazo de Cayo Lara les gane a ustedes la partida y le fastidie el negocio a los especuladores y defraudadores de este país. En ese caso, apostaremos por Valenciano una chocolatina… no será mucha la pérdida.

lunes, 22 de abril de 2013

¡¡Saludos!!


Queridos lectores, queridas lectoras, el Colectivo Puente Madera os quiere saludar en el comienzo de ésta, su nueva andadura. Para quienes no nos conozcan, el colectivo está formado por Enrique Cerro, Esteban Ortiz, Elías Rovira y Javier Sánchez. Para quienes nos conozcan, pues sólo cabe decir que tras los 10 años de escribir semanalmente en el Diario La Verdad, y la periódica participación en Punto Radio y AbTeVe (a cuyos trabajadores estamos muy agradecidos), ante la desaparición de estos medios, es nuestra voluntad seguir ofreciendo palabras e ideas para la reflexión. Esta crisis que se han inventado (¡y hay que ver qué bien les está saliendo!, o mejor, ¡hay que ver qué bien les estamos dejando que les salga!) no solamente está quitando derechos a los ciudadanos y ciudadanas, no sólo nos pretende obligar a ser más serviles, sino que está intentando llevarse por delante aquellas voces discordantes, las de quienes no comulgan con las ideas del capital, de los mercados, de los grupos políticos dominantes. Es por ello que antes esta magnífica posibilidad que nos ofrece Tualbacete, queremos seguir aportando nuestro granito. Pretendemos facilitar un instrumento de reflexión desde otras perspectivas; no necesariamente es preciso que los lectores piensen igual, sólo se trata de aportar nuevos ángulos de mirada que ayuden a tener una mayor perspectiva y más instrumentos para el pensamiento crítico. Esperamos, modestamente, poder lograrlo y poder merecernos este apoyo que se nos da por parte de este lugar de la red (que por otro lado siempre ha cubierto informaciones que a otros lugares jamás les permitieron cubrir) y también por la tuya, querido lector y querida lectora. Nos vemos aquí semanalmente. Nuevamente, un saludo.

 

lunes, 8 de abril de 2013

PROHIBIDO INDIGNARSE

Artículo publicado en tualbacete.com
 
Metidos de lleno en este abril primaveral, nos ha llegado una información directa de los borradores legislativos que están barajando nuestros gobernantes, donde todo parece que lo único que nos está quedando, como es el derecho al pataleo, está en peligro de extinción. El anteproyecto de decreto ley, apadrinado por Jorge Fernández, el jefe de la cosa del interior, va a prohibir la indignación de la ciudadanía, pues la mala uva, que nos ha provocado sus decisiones recortadoras, no es bueno que se desborde y nos provoque reacciones tan desmedidas como pedir responsabilidades a los que nos han llevado a este túnel oscuro sin salida.

A partir de ahora tendremos que detener nuestras denuncias en la calle por la estafa de la crisis, por lo que nos limitaremos a darles a Rajoy y Cospedal amables recomendaciones, para que no sigan haciéndonos tanta pupa. No hablaremos de ningún caso de corrupción, pues son inventos de nuestras calenturientas mentes. Los tasazos, copagos, recortes, reformas laborales o quitas en nuestros mermados ahorros serán celebrados con una alegría desbordante por el bien de España. Añadiremos a nuestros círculos de mejores amigos a los bancos y les daremos ayudas de nuestros bolsillos sin rechistar, para que puedan sobreponerse a las cláusulas que tanto les perjudican. En las colas de las oficinas de empleo habrá risas, abrazos y buen rollo para celebrar estas vacaciones colectivas que mejoran nuestro bienestar.

Los escraches pasarán a la historia porque no es bueno que nos confundan con grupos de izquierda radical, fascistas, pronazis o amigos de ETA. Estaremos mejor en casita, alabando las bondades del sacrosanto euro que nos lleva a una felicidad universal avalada por la bienaventurada troika salvadora.

Pues va a ser que no. No van a poder parar tanta indignación popular, por mucho que lo intenten. Estamos dispuestos a seguir reclamando colectivamente nuestros derechos, a señalar a los verdaderos culpables de este desastre, a salir a las calles, a organizarnos, a dar alternativas y a levantar un país diferente, donde lo mejor de todos nosotros sea el combustible del tan ansiado cambio. Lo importante es que sepamos que nadie pondrá puertas a nuestra indignación y que juntos podremos construir un mundo distinto, más justo.