jueves, 18 de abril de 2024

BLOQUEOS Y RENOVACIONES


El Partido Popular sigue con sus maniobras de paralizar y bloquear las instituciones en este país. El último episodio es el conflicto institucional que, con su mayoría absoluta, ha planteado en el Senado, para que el Congreso de los Diputados retire la Ley de Amnistía. Pero el pasado martes, la Mesa de la Cámara Baja rechazó el conflicto de atribuciones aprobado por el Senado, de acuerdo con los argumentos de los servicios jurídicos, considerando la mayoría progresista que lo que quería el PP es una deslealtad institucional sin precedentes en la historia democrática española, que es capaz de hacer todo lo posible por dinamitar el orden constitucional, según lo apuntado por Alfonso Gómez de Celis, vicepresidente primero del Congreso de los Diputados.

Pero, siendo lo anterior muy grave, lo más vergonzoso en la vida política nacional, que tendría que estar abriendo telediarios, un día sí y otro también, es el bloqueo que los populares están realizando a la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Su mandato está caducado, han pasado más de 5 años sin que el máximo órgano de los jueces haya cambiado a sus integrantes. Es gravísimo que el tercer poder del Estado esté incumpliendo la Constitución y esto no tenga consecuencias. No se entiende cómo estos próceres de la patria de alta alcurnia sean los primeros en incumplir la Carta Magna y la ley.

La mediación fallida del comisario europeo, Didier Reynders, que ha dejado su cargo para preparar su campaña para hacerse con la jefatura del Consejo de Europa, pone de manifiesto que la urgente renovación del CGPJ es algo que no tiene vías de solución, lo que resulta insostenible. Aunque una posible salida sería la dimisión en bloque de todos los miembros del Consejo, ocasiones han tenido pero siempre se han negado a soltar la poltrona y el suculento sueldo, pero los vocales ocupas y caducados han dejado patente que se sienten cómodos y legitimados como representantes de la oposición al gobierno. Tenemos muchos ejemplos de esta indignante actitud como cuando salieron a las puertas de dicho tribunal, para manifestarse contra una ley de amnistía, que no existía. Pues en ese momento estaban haciendo política contra un gobierno elegido democráticamente.

Lo que está provocando el PP con la Justicia no lo hace un partido político responsable y al servicio de la ciudadanía, esto es una práctica mafiosa para tapar sus desmanes y mantenerse en el poder, porque consideran a nuestro país de su uso exclusivo y a los españoles y españolas meros lacayos a su servicio. No podemos permitirlo.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció hace escasos días que daba un ultimátum al Partido Popular para que la renovación del Poder Judicial se realizara antes de que acabara este mes de abril. Los días avanzan, todo permanece encallado y va siendo el momento de exigir valentía al PSOE, para que actúe con contundencia y tome decisiones ante esta derechona antidemocrática y golpista que está produciendo tanto daño a la Justicia. Es la hora del Congreso de los Diputados, pues el Gobierno debe presentarle un nuevo texto de la Ley Orgánica del Poder Judicial, para que cambien las mayorías de renovación del CGPJ, para así cumplir con la Constitución española.

Aunque lo mismo hay una posible solución, después de la anticipada salida de Reynders, buscando un nuevo mediador que sea más cercano. Nos estamos refiriendo a Emiliano García Page, tan amigo de los barones del Partido Popular, con los que charla de forma distendida, come amigablemente y hasta es capaz de echarse unos cantos con ellos; en fin, que el presidente castellano-manchego da el perfil idóneo que seguro aceptaría el señor Feijoo para que tercie en la solución de esta lamentable situación.

Al margen de la ironía anterior, no se puede seguir por más tiempo con el descrédito del Poder Judicial, es el momento de desalojar a los okupas, de abrir puertas y ventanas en la sede de Marqués de la Ensenada, con un poco de suerte entrará la democracia. Veremos.



@CPuenteMadera


viernes, 5 de abril de 2024

LAS FLORES DE LA MEMORIA


España, como es bien sabido, anda regular de memoria democrática. La ley ha mejorado, es cierto. Franco y Queipo de Llano han sido desalojados de sus pudrideros públicos. Pero, a día de hoy, el Alcázar de Toledo sigue siendo el panteón de golpistas de la calaña de Moscardó y Miláns del Bosch. Así, como si aquello fuera el castillo del conde Drácula. ¿Se imaginan que las tumbas de Himmler o Goebbels estuvieran en los sótanos de la Isla de los Museos de Berlín? No, ¿verdad?

Pero, claro, se conoce que “Cajtilla-La Mancha is different”. Y nuestra ciudad, Albacete, por desgracia también es un poco “different”. Es especialista en dar “un pasito pa’lante” y “un pasito pa’tras”. En 2021, siendo alcalde Vicente Casañ (Ciudadanos), se reabrió el refugio del Altozano, pero de una forma tan tímida, tan acomplejada, que apenas un folio impreso en una fotocopiadora y cogido con papel celo indicaba su existencia. Cuando ganó el PP en mayo de 2023, lo primero que hizo fue quitar ese papelote y esconder, aún más, ese símbolo de la resistencia contra el fascismo. Suponemos que los populares locales actúan así en nombre de su tan cacareado concepto de “concordia”, que es como ellos llaman a la amnesia colectiva inducida desde el poder. Pero la cosa no queda ahí, claro. En abril de 2022 el Ayuntamiento instaló 25 “stolpersteine” o ladrillos de la memoria en recuerdo de los albaceteños deportados en campos de concentración. Un mes después, Albacete se unió oficialmente a la Red de Ciudades Antifascistas. Fantástico todo, sin duda. Pero, mientras tanto, nuestras vías públicas siguen rindiendo pleitesía a falangistas, divisionarios y franquistas de todos los pelajes y siguen mostrando, como si de un escaparate gigantesco se tratara, todo un catálogo de escudos, placas y plaquetas con los símbolos de la dictadura. Joder, ¿es tan difícil cumplir con la ley? ¿Es tan complicado ser demócrata, es decir, antifascista, no solo de boquilla sino también de hecho? ¿Tan traumatizados estamos todavía? ¿Tan dentro tenemos aún el franquismo que no podemos despegarnos de él? Pues bien, es muy sencillo: no habremos culminado nuestra sacrosanta Transición hasta que no nos despojemos de todas esas adherencias fascistoides y reconozcamos el papel de quienes sembraron las semillas de nuestra democracia. Como suele decir nuestro amigo Carlos Bachiller, ¿para cuándo, por ejemplo, una calle o una plaza con el nombre de Marcelino Camacho o Josefina Samper? ¿Para cuándo, por poner otro ejemplo, una ruta señalizada e informada de las Brigadas Internacionales, que hicieron de Albacete la capital mundial del antifascismo? Y, por supuesto, no habremos cerrado ninguna Transición, ni Dios que la fundó, mientras más de cien mil personas permanezcan enterradas como animales por toda la geografía española.

Dicho lo cual, ha llegado la primavera. Nuestros campos se llenan de rojos, amarillos y morados y nos recuerdan que un 14 de abril España también reverdeció. Abril es el mes de la memoria. En Albacete se han programado muchas y muy interesantes actividades. El día 12, Ainhoa Campos hablará de las fosas del franquismo en Castilla-La Mancha. Será a las 19:30 en la Casa del Pueblo. El 13 se estrena el documental Fosa de Alcaraz, realizado por Vocesenlucha y producido por la Asociación Fosa de Alcaraz. La proyección comenzará a las 10:00 en el Centro Administrativo del Ayuntamiento de la mencionada localidad y contará con la participación de familiares. El 14 se inaugurarán 4 monolitos en el cementerio de Albacete. La ruta, organizada por la asociación anteriormente mencionada y el Grupo de Amig@s Antonio Machado en colaboración con IU y PSOE, comenzará a las 11:00 en el osario. El 18 a las 18:00 se celebrará en la Diputación un cinefórum sobre bebés robados con el visionado del documental Morir tranquila. Asistirán miembros de la Asociación de Víctimas de Alicante. Finalmente, el 19 de abril se presentará, a las 19:00 en la Biblioteca Nueva del Parque, el libro Los buenos antifascistas, con la presencia de Giannis Pandelakis, su autor, y de Anastasia Tsackos, hija de un brigadista griego.

Cada 14 de abril, la tapia del cementerio de Albacete en la que fusilaron a 758 personas se llena de claveles insertados en los agujeros de las balas. Es muy emocionante. Queridos lectores, queridas lectoras, hacednos caso: nunca dejéis que las flores de la memoria se marchiten en vuestras mentes y en vuestros corazones.

@CPuenteMadera