viernes, 30 de octubre de 2020

¿REELECCIÓN? NO, GRACIAS

Parece que han pasado siglos y tan solo han transcurrido cuatro años desde las pasadas elecciones presidenciales estadounidenses, cuando la bestia parda e ignorante de Trump, contra todo pronóstico, alcanzó la jefatura de la nación más poderosa del planeta (con el permiso de China) ¡Qué largo se nos ha hecho!

Un nuevo “vigía de occidente” salió a escena con un populismo desmesurado, con una deplorable presidencia que ha profundizado el enfrentamiento y la desigualdad nacional e internacional. A la Casa Blanca, en el 2016, llegó un inesperado cafre neofascista que se jacta de su misoginia, de su xenofobia, de su negacionismo, de su supremacismo y de su insumisión fiscal, entre algunas de sus barbaries.

En muy pocos días, el próximo martes 3 de noviembre, los norteamericanos tienen una nueva oportunidad para rectificar y no caer en el mismo error. Trump debe quedar al margen, fuera de la presidencia de USA. La ciudadanía debe olvidarse de las vísceras, de la caverna, de la peor América profunda. Deben desterrar la incultura, la homofobia, el racismo, el espíritu retrógrado,… donde Trump es el máximo exponente. No olvidemos que este pedazo de carne con ojos será lo que sea, pero quienes lo pusieron en la presidencia de su nación fueron los estadounidenses. Ellos son los responsables de haberlo puesto y los encargados de quitarlo. Ya se le ha visto en infinidad de ocasiones su maldito plumero. Nadie podrá fingir desconocimiento a estas alturas. Hay que pasar página y dar una oportunidad a Joe Biden y a Kamala Harris, sin mucho entusiasmo, pero es mejor apostar por “lo que hay” frente a lo peor.

La hipotética reelección de este descerebrado, un nuevo triunfo de Trump ahora, será un impulso para el fascismo global, algo que no deseamos la mayoría de la humanidad. El pueblo de EE.UU. tiene la palabra, ojalá mande a D. Trump a la papelera o mejor que lo envíe por correo aéreo a vivir en el casoplón de Abascal. Es el momento de votar con la razón, aunque la estupidez de algunos no tiene límites y solo personas con mente tan corta y ética tan deplorable como la del personaje, pueden sentir admiración por el actual presidente norteamericano.

Toca humanizar el planeta y empezar a dar cambios locales para lograr, poco a poco, avances en la lucha por unos ideales democráticos universales. El pueblo norteamericano no debe permitir la reelección del fascismo criminal que representa la administración Trump, que ha sido capaz de la militarización para resolver disputas sociales, como lo ocurrido en Wisconsin, que para “aplacar” las protestas sociales por la injusticia racial, envió a la Guardia Nacional. ¡Esperpéntico!

El neofascismo que representa el ultra de Tump es un instrumento al servicio de la clase capitalista para arrebatar cualquier migaja a la clase trabajadora y liquidar el mínimo atisbo de organización política y sindical obrera que pueda amenazar a este capitalismo salvaje y poner en riesgo sus intereses. A los ultras como Trump hay que dejarlos fuera de juego, el momento para esto le ha llegado al pueblo estadounidense. El 3 de noviembre está ya aquí, desde esta humilde tribuna deseamos al pueblo norteamericano mucha suerte y acierto en la elección. Nos va mucho en juego a toda la ciudadanía de esta aldea global.

¡La lucha sigue!


@CPuenteMadera



sábado, 24 de octubre de 2020

Contra Aaaaaaaaaaaaaaaaa…


Nuestro artículo es contra Aaaaaaaaaaaaaaa… ¿Aaaaaaaaaaayuso? Ayuso, ya saben, la presidenta que quiere que para que confinen Madrid tienen que confinar a todos los demás, pero luego a todos sí pero a Madrid no, y que protesta contra el estado de alarma en Madrid y al mismo tiempo pide el toque de queda en Madrid, pero cuando llega la reunión interterritorial de Sanidad dice que toque de queda en Madrid no. Ayuso, sí, ella… pero, no, nuestro artículo no es contra Ayuso.

Nuestro artículo es contra Aaaaaaaaaaaaa… ¿Áaaaaaaaaaalvarez de Toledo? Ella, doña Cayetana, la que esta semana había dicho que no al no de los suyos, pero luego al final ha dicho que no al sí de los otros, o sea que no dijo que no al no hasta el final… lo que tenemos que reconocer que nos deja más perplejos que lo perplejo que el jueves se quedó otro A., pues solo sabíamos que ella afirma que no es imprescindible que las mujeres digan sí para que se entienda que un sí es un sí, pero su señoría no había ilustrado a estos pobres ignorantes sobre la negatividad contradictoria… bueno, menudo lío, dejémoslo… pero, no, no es Álvarez la que nos inspira estas líneas.

No, nuestro artículo es contra algo más grande y peligroso que Ayuso y doña Cayetana juntas: nuestro artículo es contra Aaaaaaaaaaaaaa… Amazon. Sí, ya lo sabemos: que levante la mano quien no haya pedido nada a través de Amazon, nosotros los primeros. Pero que levanten la mano también todos aquellos que, a raíz de la crisis provocada por el COVID, se han dado cuenta de cómo, casi imperceptiblemente, a golpe de un clic, los grandes se hacen cada vez más grandes destruyendo a los pequeños que nos rodean, en ocasiones simplemente por nuestra comodidad como consumidores.

El manifiesto Contra Amazon, de Jorge Carrión, alcanzó eco mundial justo antes de la extensión de la pandemia, explicando siete razones por las que un ciudadano amante de los libros y la democracia debería desconfiar de esta multinacional. Vamos a analizarlas… pero, ay, se nos acaba el tiempo y el espacio, así es que volveremos contra Amazon en otro artículo, porque en este no queríamos dejar pasar la ocasión de despedirnos de otro Aaaaaaaaaaaaaaaaaa… sí, este sí, este sí que es Abascal.

Por si no lo conocen, Abascal es un señor que nos quiere gobernar y al que el PP le seguía la corriente, mientras afirma y repite a la gente que para nosotros sería mejor vivir bajo la dictadura franquista. Pero este no es un artículo contra Abascal, no, es solo una despedida: ya no hace falta estar contra él porque ahora, según el centrista Casado, Abascal es ya solo un montón de escombros que pasará a la historia sin pena ni gloria patria. Casi nada… ¡y ojalá! Allí, finalmente, en el limbo histórico al que lo ha mandado el Parlamento español, Abascal podrá descansar de su fatigosa lucha contra la mayoría de los españoles, y tendrá un montón de tiempo para pedirse libros laudatorios sobre Franco y otras malas hierbas. Por Amazon, por supuesto.



@CPuenteMadera


domingo, 18 de octubre de 2020

LADRAN, LUEGO…



Cuando nos da por pensar qué sería de la gente más humilde y en general de la mayoría de los españoles y las españolas, si con la que está cayendo no hubiera un marcado apoyo a los trabajadores, y por el contrario el gobierno trabajara exclusivamente para quienes más tienen, en la justificación de que de sus migajas, comerían los demás, se nos pone el vello de punta.

Claro, que las cosas se hagan así no gusta a algunos, y en esas que el jueves, se presenta una moción de censura al gobierno. Estupendo sin duda, ladran señal de que cabalgamos. Por cierto, hacemos aquí un inciso para aclarar que dicha frase jamás se dijo en El Quijote. Era empleada por Ruben Darío para ignorar a quienes le criticaban por ser mestizo, y él había añadido inexplicablemente un Sancho (Si los perros ladran, Sancho, es señal que cabalgamos) a la frase original que realmente era de Goethe, concretamente de su poema Ladran (Kläffer, 1808).

A estas alturas, aún no se sabe la postura de algunos grupos al respecto. Por ejemplo, el mismísimo PP, no apoyará, pero duda si dejarle claro a don Santiago que para ellos es un mindungui, o pasarle la mano por el lomo, que nunca se sabe cuándo hará falta. Sí parece que se va disipando la idea de que personalidades como Belén Esteban o Bertín Osborne, entre otros personajes culturales y políticos, graben un vídeo de apoyo al grito de “¡¡Viva el voto de censura!! ¡¡Viva!!”

A propósito de las intenciones de los patriosuizos. ¿Saben algunos que, según la Constitución, en una moción de censura no solo se echa a un presidente, sino que se elige al que la presenta? ¿La solución es, tras un previsible debate hostil, elegir a la rabia y al odio? Estamos convencidos que los ultramontanos con su iniciativa solo desean la vuelta al pasado más rancio.

Mientras, desde el gobierno seguirán tomando medidas pensadas en toda la comunidad, en la globalidad. De apoyo a parados, trabajadores, a los autónomos y pequeños empresarios, haciendo malabares entre intereses sanitarios (fundamentales) y económicos (inaparcables). Sin duda se podría hacer mejor, sin duda cada cual tiene su receta, pero no es momento de ascuas y sardinas y, por desgracia, esto es algo que se está viendo demasiado.

Así ya se priorizan intereses de partido sobre los de la comunidad: no acepto un gobierno legítimo porque no es mi gobierno, no asumo políticas de Estado porque así daño al gobierno (a costa de dañar a esa España de la que tanto les gusta vanagloriarse), no renuevo el Consejo General del Poder Judicial porque no pongo a los míos, etc., etc. La estrategia es vieja: cuanto peor para los españoles, mejor para mí.

Lo dicho, sin duda se podría mejorar, pero menos mal que todo esto nos ha pillado con gente que tiene puesta la mente en los ciudadanos y no en su ombligo y ni en el de su amo.



@CPuenteMadera















domingo, 11 de octubre de 2020

ANA CON “A”



Pues, nada, aquí estamos de nuevo. Nos retiramos a nuestros aposentos hace ya unos meses, pero el mundo parece haber cambiado poco. Ahí sigue el coronavirus haciendo de las suyas. Ahí sigue el rey emérito en los Emiratos, rodeado de lujo y podredumbre. Ahí sigue Díaz Ayuso lloriqueando por las esquinas, como una niña caprichosa. Ahí sigue el energúmeno de Trump anunciando que no aceptará una derrota en las elecciones y llamando a los grupos neonazis a la insurrección. Ahí siguen decenas de temporeros viviendo a la intemperie en nuestra propia ciudad, sin otro auxilio que el de algunas organizaciones solidarias y algunas entidades benéficas… Bueno, de todo ello, y de muchas cosas más, iremos hablando en próximas entregas.

Porque hoy, en el entorno del 12 de octubre, queríamos aprovechar para dar las gracias a todas aquellas personas que, de un modo u otro, se enfrentaron a la voracidad insaciable de los conquistadores y lucharon por la dignidad de los pueblos originarios: desde Gonzalo Guerrero, que combatió a Pedro de Alvarado y murió tatuado como un guerrero maya, hasta la activista hondureña Berta Cáceres, asesinada por su tenaz oposición a la construcción de un mega proyecto hidroeléctrico, pasando por Túpac Amaru, Sandino, el Che y tantas y tantas otras personas y colectivos… Esa es la gente que hoy queremos conmemorar. El resto se lo dejamos a la cabra de la Legión y sus palmeros.

Al respecto, es justo recordar que, aunque la iglesia como institución justificó los abusos de la conquista, una parte importante de quienes se pusieron del lado de los más débiles procedía de sus mismas filas. Como fray Antonio de Montesinos, que ya en 1511 advirtió al mismísimo Diego Colón de que se encontraba “en pecado mortal por la crueldad y tiranía que usáis con estas gentes”. Como fray Bartolomé de las Casas, que unos años después denunció cómo los españoles con “estas ovejas mansas” no hicieron otra cosa que “despedazallas, matallas, angustiallas, afligillas, atormentallas y destruillas (…)”. Había que ser muy valiente para alzar la voz, proclamar la verdad desnuda y enfrentarse a los dueños del mundo, porque siempre lo más fácil es callar y obedecer. Pero su ejemplo sembró, y de aquellas semillas rebeldes nació, unos siglos más tarde, la Teología de la Liberación. Nacieron Ignacio Ellacuría, Óscar Romero, Pedro Casáldáliga, Ernesto Cardenal, Leonardo Boff, María López Vigil… Y nació, en resumen, toda una legión de hombres y mujeres que, como afirmó Salvador Allende, reivindicaba “al Cristo que echó a los mercaderes del templo”. Mientras otros cacareaban desde sus mecedoras, esta iglesia militante bajó al barro de la miseria extrema, comió el pan de los pobres, trabajó codo con codo con los más humildes, participó de proyectos políticos y sociales transformadores y llegó a constituir una amenaza tan severa para el poder establecido, que la lista de sus mártires haría interminable este artículo. Y eso merece un respeto.

En fin, quien nos conoce sabe que nosotros somos más bien “herejes”, y que defendemos una visión materialista de la historia y esas cosas, pero hoy queríamos mostrar nuestro reconocimiento y nuestro agradecimiento a todas esas personas que interpretaron el evangelio como una herramienta para la liberación de la humanidad. Pero no solo porque se aproxime el 12 de octubre, eso nos da igual, sino porque recientemente nos ha dejado Ana Bañón, una cristiana de base a la que admirábamos y queríamos un montón. Ana fue una de las fundadoras de la comunidad El Olivo, y pertenecía a Justicia y Paz. Fue en las listas municipales de Izquierda Unida en 1999. Colaboró con todas las causas justas. Defendió siempre a los más débiles. Junto a Ángel, su esposo, educó a sus siete hijos/as en la bondad y la solidaridad. Vivió de forma cordial y generosa hasta el final. Si existe el cielo, nadie lo merece más que ella. Mientras tanto, su nombre quedará escrito para siempre en nuestros corazones con “a” de amor: amor por la vida, amor por la verdad, amor por la justicia, amor como un profundo compromiso con los demás… Sin duda, las formas de la eternidad son infinitas.


@CPuenteMadera