lunes, 30 de diciembre de 2013

Crítica y uvas


Benito Pérez Galdós, escribiendo sobre el estado de la cultura en España en su prólogo a La Regenta de Clarín, reflexionaba sobre el ejercicio español de la crítica negativa. Esta crítica se ejercería por los españoles de forma tan nociva que “por ella quizá hemos llegado a la insana costumbre de creernos un pueblo de estériles, absolutamente inepto para todo […] Pensamos demasiado en nuestra debilidad y acabamos por padecerla”. Animaba Pérez Galdós, para revitalizar al enfermo nacional, a alzar solo la voz para repartir alegría y oxígeno, para animar a los que alientan esfuerzos útiles.

Reconocemos que muchos de nuestros escritos son ácidamente críticos, porque se nos hace insoportable sentirnos rodeados de tanta fechoría e injusticia. Pero, haciendo caso de Galdós, intentaremos cerrar el 2013 con algunas alabanzas a algunos de los que se lo merecen (a todos no podemos llegar)… eso sí, realzando más su valía poniéndolos junto a otros comportamientos menos ejemplares… una modesta especie de “Vidas paralelas”.

Admiramos a todos los trabajadores y trabajadoras que sobreviven cobrando el salario mínimo interprofesional que el gobierno ha vuelto a congelar para el 2013. Fátima Báñez, la ministra que confía en la Virgen del Rocío, les ha dejado de nuevo en los 645’30 euros mensuales, a merced de los empresarios a los que el PP entrega barata la mano de obra.

Admiramos a todas las mujeres que tienen y tendrán la valentía de enfrentarse a la ley de Gallardón, como ya escribimos la semana pasada.  

Admiramos también a los futuros sancionados por la ley de seguridad del PP, que defenderán la libertad con la fuerza de la democracia, y que no se asustarán  de los camiones-manguera, las cámaras, las multas y los antidisturbios.

Recordamos a los que han tenido que irse de este país porque el capitalismo los ha arrojado de él, mientras los capitalistas se siguen quedando aquí porque sus fortunas son cada vez más grandes y están cada vez mejor protegidas por el gobierno.

Aplaudimos a los que no se rinden y, con más o menos confianza, se presentan en los juzgados para denunciar a las compañías eléctricas y al gobierno… y aplaudiríamos más si los denunciados tuvieran nombre y apellidos, pues son ejecutivos y no “entes” quienes deciden desangrar a los consumidores.

Jaleamos a todos los trabajadores que están luchando porque no desaparezcan sus empresas al ritmo de la precarización y la deslocalización. Animamos a todos los profesionales de la educación y la sanidad, porque ellos saben bien cómo será nuestro país cuando el PP arrase los servicios públicos esenciales.

Queremos dar las gracias a los que nos leen, pocos o muchos, y a los que nos hacen llegar sus críticas y sugerencias. Damos las gracias a los medios de comunicación que nos permiten o han permitido seguir expresándonos, con más o menos acierto, pero con honestidad. Animamos a aquellos que intentan que Albacete no se convierta en un latifundio informativo.

Deseamos a todos un mejor 2014… quizá pueda pensarse que, conforme van las cosas, fácilmente será mejor… pero también puede afirmarse, como la mayoría de la población teme según las encuestas, que podría ser peor. Para evitar eso, solo habría que seguir algunos de los ejemplos antes citados, sumarles más y multiplicarlos todos… porque en las manos de los pueblos suele estar su destino.
Feliz 2014, ánimo para todos y todas.




Artículo publicado en tualbacete.com




domingo, 22 de diciembre de 2013

CUANDO NOS GOBIERNAN LOS OBISPOS


Decía J. Boston que la libertad es la distancia entre la Iglesia y el Estado. Hay gente que se asombra y escandaliza de que en algunos países del Islam, la religión sea quien marque el perfil de las leyes. Ya saben, aquello de la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. La Iglesia católica, sus gobernantes, durante largo e intenso periodo se dedicaron a hostigar al anterior gobierno para el buen provecho de su sucesor en la alternancia, el Partido Popular. Y ahora pasan factura. La ley de educación es una de las más claras demostraciones de ello. El hecho del peso de la Iglesia al legislar no es nuevo. Con Franco, por poner un mínimo ejemplo, estaba prohibido divorciarse (excepto famosos y ricos): era lo que mandaban los de las sotanas. Luego eso se hacía insostenible, porque los propios políticos de la derecha incumplían ostentosamente dichas disposiciones y hubo que ceder, aprobándose la ley del divorcio. Pero en aquellas parcelas donde no es notorio el hecho, donde las cuestiones quedan en la privacidad de una clínica española o extranjera, se pueden seguir permitiendo firmar leyes con una mano mientras se santiguan con la otra y actúan de otra tercera forma.

Ahora, después de que al PSOE le costara entenderlo (es marca de la casa, les cuesta, pero a veces, sólo a veces, finalmente llegan) y hubiera que esperar largos y largos años de desgracias e injusticias (no tuvimos ley de plazos ¡hasta 2010!, en su debe está apuntado) el PP se decide desandar lo andado…. y dar aún unos cuantos pasos más para atrás. No ya es sólo gobernar según dictamen de la Iglesia católica, sino practicar la sumisión ante sus más rancios sectores. Legionarios, opusianos y quicos ya levitan.

Lo decíamos hace unas semanas, ¿nadie del gobierno se pregunta que no va a trascender absolutamente nada de cuanto hagan? Su contexto social está fuera de todo entorno geopolítico. Gobiernan para su gusto personal de unos años (esperemos sean pocos) pero como decíamos, cualquier nuevo gobierno de derechas, centro o izquierda no deberá tardar ni 24 horas en derogar leyes como las de educación, seguridad ciudadana, aborto, etc. Esta nueva ley supone un ataque frontal contra las mujeres, a las que la experiencia demuestra que se les aboca a la clandestinidad y los riesgos de su salud y vida. Claro, lo de siempre, las ricas irán como si nada a cualquier clínica extranjera (vuelven los tiempos donde se llamaba a una de estas clínicas europeas y te contestaban directamente en castellano), sin problemas. A las de clase medía les costará un muy importante esfuerzo en todos los sentidos; y las trabajadoras y sus hijas volverán a las tragedias. Esto es lo que les importa a los que dicen defender “la vida”.

Se pierden derechos, dignidad y se ponen en peligro la salud y la vida de las mujeres, todo porque unos cuantos siguen empeñados en que todos y todas debemos vivir y pensar exactamente como ellos. Pues nada, a seguir recortando derechos, salarios, pensiones, y libertades, y eso sí, no nos olvidemos de ocupar nuestro tiempo discutiendo de Cataluña, que si no los nacionalistas y el PP se enfadan. Amén.



@CPuenteMaderaAB

lunes, 16 de diciembre de 2013

ENGAÑABOBOS



Por mucho que se empeñe la historiografía oficial, los antiguos reinos no eran otra cosa que las fincas particulares de las distintas dinastías. Para mantener o acrecentar el patrimonio familiar, los reyes no dudaban en expoliar a su pueblo mediante tributos que no pagaba la nobleza y en enviar a sus súbditos a las infinitas guerras que hicieron de Europa un auténtico matadero. La historia de la monarquía es la historia de los inmensos sufrimientos causados, tantos que los aduladores de la Corte tuvieron que inventarse el cuento de que era Dios quien elegía directamente a sus majestades, de modo que rebelarse contra el poder equivalía a rebelarse contra el cielo y adquirir billete directo hacia el infierno. ¿Y quién se arriesga a tirarse toda la eternidad abrasándose en un caldero por evitar unos cuantos añitos de padecimiento?

                La engañifa funcionó, con más o menos fortuna, durante siglos, pero a finales del  XVIII los franceses le segaron el cuello a Luis XVI (y, de paso, a unos cuantos miles de nobles) y se dieron cuenta de que la tierra no temblaba bajo sus pies. Así empezó una nueva época que no tardó en generar relatos propios para camuflar una estructura social basada en el monopolio oligárquico del poder y en la explotación del hombre por el hombre. En este caso, la maniobra de despiste consistió en desviar la atención de los supuestos ciudadanos hacia un concepto abstracto nuevo denominado patria o nación. Todos sentimos un cierto afecto por la tierra en la que nacimos y yacen nuestros antepasados, y todos nos reconocemos en un legado cultural que nos permite comunicarnos con nuestros paisanos y nos identifica ante el resto del mundo, pero los políticos del siglo XIX no se conformaron con proponer un juego de sentimientos más o menos ambiguos, sino que elevaron el concepto de nación al grado de dogma religioso. Plantearon el hecho nacional como algo preexistente, inmutable, sagrado e indiscutible, lo mismo que el Dios con que en tiempos anteriores se justificaron las peores atrocidades. Curiosamente, los mismos gobernantes a los que se les llenaba la boca de soberanía nacional monopolizaron el poder mediante el fraude electoral y el turno de partidos, y saquearon el patrimonio público mediante las desamortizaciones para enriquecerse ellos y las oligarquías a las que pertenecían, dejando la patria hecha un guiñapo. Mientras tanto, muchos obreros, alienados por la propaganda del régimen, seguían pensando que sus enemigos potenciales eran los obreros de otros países, y miles de ellos, millones de ellos, murieron en las sucesivas carnicerías organizadas por los estados durante el siglo XX.

                Y con esos antecedentes llegamos a nuestros días. A todas horas y en todos los medios, contemplamos cómo los nacionalismos patrios, en este caso el nacionalismo unionista español y el nacionalismo independentista catalán, se embisten como dos carneros. Una vez, y otra, y otra… El espectáculo no es casual, ni gratuito. Mientras nuestros gobernantes y sus camarillas mediáticas encienden con sus discursos las peores pasiones, los ciudadanos  se olvidan por un tiempo de que se están desmantelando los servicios públicos y se están degradando hasta extremos hasta hace poco insospechados las instituciones democráticas que encarnan la soberanía nacional. Desde luego, no seremos nosotros quienes neguemos a nadie el derecho de opinar y decidir acerca de su futuro, pero conviene recordar que todos los nacionalismos son unos engañabobos. La patria del trabajador es la justicia, y sus compatriotas, los trabajadores del resto del mundo.

@CPuenteMaderaAB



Artículo publicado en la sección de opinión de tualbacete.com

lunes, 9 de diciembre de 2013

DE RATAS Y GIGANTES


Hay seres humanos que nadan en la riqueza robada a sus congéneres. Medran en los recovecos de un sistema injusto que otros como ellos han apuntalado para que todo sea como siempre, para que el empobrecimiento de los ya pobres enriquezca más a los ya ricos. Esos seres son, entre otros, los directivos de los bancos europeos multados esta semana por la Comisión Europea por conspirar para elevar artificialmente el Euribor. Los segundos, las víctimas del parasitismo, son todos los millones de europeos que han pagado de más por las hipotecas porque esos banqueros han conspirado para robarles.

La Comisión va a multar a los bancos pero… ¿qué pasa con sus directivos? Las entidades pagarán la multa con parte del dinero que previamente han robado a sus clientes, a todos nosotros. ¿Y ahí quedará todo?  ¿No hay responsabilidad individual por toda esta gigantesca estafa, por este robo mastodóntico? ¿No son ladrones los directivos de los bancos? ¿No tienen nombre, apellidos y cara, los altos ejecutivos que decidieron robar a los europeos? ¿No tienen nada que explicarnos Frédéric Oudéa, presidente de la francesa Société Générale, Jürgen Fitschen, copresidente del alemán Deutsche Bank, o los presidentes de RSB, JP Morgan, Citigroup, RP Martin, UBS y Barclays? ¿Nada que justificar el francés Frédéric Oudéa, que ya en 2009 intentó hacerse con un lote de “stock options” de casi 25 millones de euros? ¿Nada que explicar el alemán Jürgen Fitschen, bajo investigación por evasión de impuestos? Ellos, los adalides del capitalismo liberal, han manipulado uno de sus supuestos mandamientos (la libre competencia) para amañar al alza un índice con el que asfixiar a todas las familias… ¿y no va a suceder nada? ¿No va a pasarles nada? ¿Dónde está, entonces, la justicia? ¿Existe la justicia?

Parece increíble que esos banqueros, esas ratas, pertenezcan a la misma especie que Nelson Mandela. Parece mentira que un hombre que resiste en una celda 27 años, y sale de ella con los bolsillos vacíos pero el corazón lleno de sabiduría y concordia, sea congénere de quienes no tienen escrúpulos en robar a millones de personas para acumular millones de euros en cuentas opacas, coches, yates, mansiones… Mandela, gigante de la Historia, hombre admirable, estuvo confinado en condiciones miserables en una celda que los banqueros europeos, ratas de la historia de la infamia, nunca olerán ni de lejos. Cuesta creer que quien sin pedir nada a cambio dio toda su vida por la igualdad y la justicia, tenga algunos genes en común con los miserables que impunemente despojan a sus conciudadanos para, después, exigirles a través de los gobiernos que ellos mismos controlan que se aprieten más el cinturón para “salvar a la banca”.

Tenemos que ser más Mandelas, tenemos que extender y explicar sin descanso su ejemplo generoso a niños y jóvenes. Por eso mismo es ya inaplazable terminar con la impunidad con la que algunos emponzoñan todo lo que de hermosamente gigantesco tiene la especie humana. No hay democracia sin igualdad, y no hay igualdad sin justicia, y no hay justicia si no hay cárcel para los banqueros y los políticos capitalistas que amparan su corrupción. Cárcel para ellos y, con el mismo afán de justicia, honores para los faros que nos muestran que somos capaces de lo más grande, honores para Mandela y para todos los gigantes que nos son imprescindibles porque luchan toda la vida. Adiós, Madiba.


@CPuenteMaderaAB

lunes, 2 de diciembre de 2013

SUAVE QUE ME ESTÁS MATANDO

                                             
Como todo el mundo sabe, en su día, la calle era de Don Manuel. Hoy como todo ha ido a más, España entera pertenece al PP. Así lo creen ellos y así actúan. Y quien es español es del PP y quien no es del PP, no es español. Y no se dan cuenta que esa no debiera ser forma de gobernar, pero han tomado todo como su cortijo y obran en consecuencia. Parecen no querer ver  que no va a trascender absolutamente nada de lo que están haciendo, absolutamente nada. Porque una cosa es salir elegido y lógicamente gobernar y legislar con tu perfil político, pero para todos y todas, y otra muy diferente hacerlo creyendo que el 100% de la ciudadanía es del Opus Dei. Cualquier gobierno que les suceda, está abocado a cambiar, una a una y a la velocidad del rayo, todas las leyes que el PP está fabricando para ellos. Y nadie se podrá quejar de que eso ocurra, cuando a quienes han hecho tales desprecios a los ciudadanos no les ha temblado el pulso.

La Ley de educación ha sido diseñada para contentar a los sectores más reaccionarios y poderosos de la Iglesia. No le gusta a nadie nada más que a ellos. Ningún gobierno de izquierdas, de centro o de derechas podrá dejarla sin tocar en su momento. No se sostiene por ningún sitio.

Ahora nos vienen con la Ley de Seguridad ciudadana. Bien, alguien oye esto y piensa que de verdad se trata de una ley que aumentará la seguridad de todos y todas, pero no, el anteproyecto de la ley está pensado por y para ellos nuevamente. Mantener y aumentar los privilegios de los poderosos y acabar con cualquier atisbo de protesta. Han venido llevando a los tribunales multitud de casos que sistemáticamente han ido perdiendo, y finamente han decidido que si esas cosas quedan en manos de la policía que ellos mandan, en vez de en manos de los jueces, a partir de ahora se pasarán la democracia por el arco del triunfo y se castigará a la postre cuando, como y a quien ellos decidan. Nuevamente, de mantenerse estas intenciones en la ley definitiva, cualquier gobierno de izquierdas, centro o derechas que les suceda, deberá cambiarla. Tanto se les había ido la mano en los borradores que alguien les debió decir que el anteproyecto necesitaría reformas importantes para poder aprobarse. Y así ha sido, aunque incluso queriéndola hacer más suave, tenemos la sensación de que nos están matando. El Congreso, lugar que supone la esencia del poder que los ciudadanos y ciudadanas transfieren a los políticos, queda a modo de cortijo de uso privado. Si usted quiere protestar por alguna ley que allí se elabore, no vaya a sus aledaños, váyase como es lógico a un barbecho a hacerlo. Se sigue avanzando en la misma línea que ha llevado a España a ser el país europeo que a pesar de tener menos delitos y delincuencia común, tiene más presos. Su tasa de criminalidad sigue bajando, y al contrario de lo que cabría esperar en cualquier país gobernado razonablemente, se empiezan a considerar sancionables y a endurecer los castigos de cosas que hasta ahora no lo eran. Centrando la atención de la gente en los problemas económicos, intentan colar de  rondón toda una batería de leyes que maman de la filosofía más rancia y antidemocrática y que se sustentan en la misma base que las proclamas de los Queipo, Sanjurjo, Mola,… o, sin ir tan lejos, del portavoz del PP Rafael Hernando. ¡Vaya tropa!


@CPuenteMaderaAB



 Artículo publicado en la sección de opinión de tualbacete.com

lunes, 18 de noviembre de 2013

Parole, parole, parole…

En los años 70 del pasado siglo se hizo muy famosa la canción “Parole, parole”, un magnífico dueto, donde la inigualable Mina se quejaba de las promesas incumplidas de su partenaire. Nos ha venido a la cabeza ese pegadizo estribillo de “palabras, palabras, palabras” a lo largo de estos últimos días. Ese soniquete repetitivo lo ha provocado el contenido de la pasada Conferencia Política Federal del PSOE, pues mucho nos tememos que las conclusiones de todos sus debates ampliados queden en bonitas soflamas al viento y muy poco más.

No es que seamos desconfiados, ni mucho menos; es que han sido tantas las traiciones a los trabajadores y trabajadoras de este país, en los últimos años, por los dirigentes del partido de Rubalcaba, que no nos fiamos ni un pelo de “esa vuelta” a los postulados iniciales de la socialdemocracia, que todavía están criando malvas o tapados por tres dedos de polvo con las consiguientes telarañas, por su olvido y por el transformismo a principios conservadores derivados del maldito Tratado de Maastricht.

La autocrítica, sobre las decisiones adoptadas en el pasado reciente contra los derechos sociales de la ciudadanía española, ha sido aparcada en el enésimo sótano de la calle Ferraz, no se acreditó en el IFEMA. No olvidamos que fue Zapatero quien en junio del 2010 impuso una reforma laboral  que dinamitó las políticas públicas de reactivación económica, recortó drásticamente nuestros derechos laborales y al mismo tiempo renunció a una reforma fiscal más justa, suficiente y redistributiva. Nuestra memoria está fresca, pues fue en el verano de 2011 cuando el PSOE y el PP pactaron una reforma del artículo 135 de la Constitución Española, en la que se prima el pago de la deuda a la banca antes que invertir en nuestros derechos básicos (educación, sanidad, pensiones,…)  De esto nada se dijo el pasado 10 de noviembre en las conclusiones de la Conferencia. Apareció la amnesia en el salón.

Lo que sí han dicho es que quieren acabar con las puertas giratorias, por eso como primera medida de ética los nuevos socialistas habrán decidido que Felipe González renuncie al sueldo vitalicio del Estado o al de Gas Natural, ¿o no? También han hecho una apuesta clara por mantener, en pleno siglo XXI, una institución caduca como es la Monarquía (pag. 384 de la ponencia), atada y bien atada por el señor bajito del Ferrol, algo que no perdonan los auténticos seguidores de Pablo Iglesias.

Estamos muy hartos de mentiras, engaños y palabras huecas. Nuestra desconfianza tiene su fundamento. Y para ahondar en estas contradicciones, tardó poco nuestro paisano Pepito Bono -el del “monasterio” de Defensa-, en salir cacareando que “prefiere que el PSOE se entienda antes con el PP que con Izquierda Unida”. ¡Toma del frasco, Carrasco! Este dirigente histórico, en horas bajas, no se corta y muestra su verdadero tupé lleno de caspa, un populismo venido a menos, que todavía tiene unos cuantos adeptos en la sede de la calle Pedro Coca de Albacete. La embajada en el Vaticano está esperando al señorito de Salobre, y el propio Rajoy lo tendrá previsto en su agenda para proponerlo en el próximo Consejo de Ministros. Sería un magnífico exilio para Don José, avalado por el propio Rouco y el arzobispo de Granada.

Las decisiones, los hechos y las medidas adoptadas en contra de los trabajadores son las que cuentan, lo demás es puro artificio verbal y mercadotecnia política. No jueguen con nuestra memoria.

@CPuenteMadera



Artículo publicado en la sección de opinión de tualbacete.com


lunes, 11 de noviembre de 2013

EL MUNDO ENTRE COSTURAS


La mayoría de los medios de información nos recordaron el pasado sábado que un 9 de noviembre de hace 24 años cayó el Muro de Berlín. Bueno, bien; estamos de acuerdo con que aquella construcción representa un episodio lamentable de nuestra infinita historia universal de la infamia, pero, una vez que del engendro solo quedan cascotes, ¿por qué no volver la mirada hacia los innumerables muros que todavía siguen en pie?

            Cada muro constituye un fracaso de la humanidad. El de Berlín se extendía a lo largo de unos 120 kilómetros. El muro que está construyendo Israel para encarcelar a los palestinos de Cisjordania alcanzará los 700 kilómetros, y las ocho líneas de muros y búnkeres que ha levantado Marruecos para defender el territorio ocupado del Sáhara Occidental sobrepasan los 2700 kilómetros. Para muchos palestinos, acudir al trabajo o visitar a un familiar puede ser un infierno. Hay mujeres y niños que mueren en el parto porque no llegan a tiempo a un hospital. Y en los campos de refugiados saharauis, cientos de miles de personas languidecen ante la pasividad o, por qué no decirlo, la traición manifiesta de los gobiernos occidentales. ¿Por qué esos muros, que también son muros de vergüenza, no aparecen en nuestras pantallas o en las hojas de nuestros periódicos? ¿O es que hay muros malos (los comunistas) y muros buenos (los que hacemos nosotros, los capitalistas, para protegernos de los parias de la tierra)?

            Hay muros de cemento, pero hay también muros de arena, muros de agua e incluso muros de concertina, que no son muros musicales, sino alambradas diseñadas para desgarrar la carne de los infelices que intenten superarlas.  En el entorno del Muro de Berlín murieron alrededor de 125 personas a lo largo de 28 años;  el pasado 30 de octubre nos enteramos de que, en tan solo un día, perecieron en el desierto de Níger 87 inmigrantes que aspiraban a llegar a Europa buscando una vida mejor. De ellos, 48 eran niños. Ya lo contaba el joven gambiano Kalilu Jammeh en su estremecedor relato autobiográfico (El viaje de Kalilu): el 90% de las personas que huyen de la pobreza del continente africano sucumben en el desierto, abrasados por el sol o asesinados por bandas de delincuentes. Sí, 125 muertos son demasiados muertos, cómo no, pero al menos existen museos, placas, monolitos… que evocan su memoria y les rinden homenaje. Ahora bien, los más de 20000 muertos que yacen en el fondo del Estrecho de Gibraltar, ¿dónde tienen su museo, su placa o su monolito? Una vez más, los países “civilizados” se limitan a mirar para otra parte.

            El sistema, o sea, el poder, el capitalismo, se construye sobre muros tangibles, como los anteriores, e intangibles, como las injusticias, las desigualdades, los abusos. El paro y la precariedad laboral levantan muros entre los ricos y los pobres. La degradación de la educación pública abre un abismo a los pies de los jóvenes de la clase obrera y convierte los puestos claves de la sociedad en un fortín al que solo acceden los privilegiados. Por todas partes se siguen levantando muros que son como brechas en la piel de la humanidad, como profundas costuras por las que sangra el mundo igual que un animal herido. Y lo peor es que no somos capaces de verlo, entre otras cosas porque el sistema, o sea, el poder, el capitalismo, a lo mejor también ha construido un muro delante de nuestros ojos.


@CPuenteMaderaAB




* El Colectivo Puente Madera está formado por Enrique Cerro, Esteban Ortiz, Elías Rovira y Javier Sánchez.



Artículo publicado en diarioAb.com, en la sección de opinión "Brotes Rojos" 

lunes, 4 de noviembre de 2013

Rebajas



Carmen Bayod quiere rebajar los impuestos municipales en Albacete. El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, también va a rebajar la parte del IRPF correspondiente a la Comunidad… sobre todo en el tramo máximo, a aquellos que más ganan. Montoro se resiste, pero Cospedal, desbordada en este como en otros tantos asuntos, anuncia rebajas fiscales a discreción para el año próximo. Ciudadanos todos, prepárense: comienza la gran carrera por la rebaja fiscal.

Preparen sus escuchimizados bolsillos para recibir algunos euros de la magnanimidad del PP. Sí, tiene usted razón, aunque sean pocos, buenos son, algo harán. El PP también sabe que esos eurillos son pocos, muy pocos, y que no van a mejorar absolutamente en nada el nivel de vida de los españoles, un nivel de vida que sus gobiernos se han encargado de arrastrar hasta el suelo… pero es que no se trata de eso en realidad. De lo que se trata, y no descubrimos nada, es que las elecciones (municipales, autonómicas y generales) son en 2015, y de que el PP intenta engañar a los mismos ciudadanos a los que lleva dos años pauperizando: en el 2014 les bajarán un poquito algunos impuestos… a ver si así olvidan el calvario por el que les estamos haciendo pasar.

La desmemoria de los pueblos suele jugarles malas pasadas. Maquiavelo ya se lo aconsejaba al Príncipe: al pueblo, hágale usted todo el mal de una vez, que el tiempo todo lo cura y se olvidarán los agravios con futuros pequeños gestos de magnanimidad. En fin, nada nuevo. ¿Se dejarán de verdad engañar los ciudadanos por las rebajas del PP, después de que sus gobiernos hayan agravado la crisis económica, desprotegido a los más débiles, desmantelado a la clase media, echado a cientos de miles de jóvenes del país, etc., etc…?

Y, para colmo, está la otra injusticia: los agravios comparativos en sus rebajas fiscales. Por ejemplo, no van a bajar los impuestos a los pobres Emilio Botín o al dueño de Mercadona o a los propietarios de Zara… y eso es injusto. Nos da igual que no puedan bajárselos porque nunca se los subieron, porque en la crisis más angustiosa de la democracia nunca hayan subido los impuestos a los más ricos… eso es verdad, pero ellos, los pobres, también tienen derecho a su rebaja fiscal, una rebaja todo glamur y fashion: yates más baratos, fiestas de cumpleaños con confetis galácticos, fondos en las Caimanes con mayor desgravación, mansiones VPO en Ibiza, y (como siempre en este capitalismo liberal pero subvencionado) millones en ayudas y desgravaciones para contratar trabajadores de usar y tirar y usar y tirar y usar, hasta tirarlos definitivamente a los setenta años.

Vaya, ¡cuánta demagogia!, pensarán algunos: a Botín y los otros también les han subido el IVA, como a todos los demás. Cierto, nos han pillado. Botín ha tenido que pagar el mismo incremento del IVA que el pensionista y el desempleado… tienen razón, rectifiquemos pues: Bayod, Cospedal, González, Rajoy, rebajen, rebajen todos esos injustos impuestos indirectos a todos esos pobres multimillonarios. Ellos, sin duda, les seguirán votando… ¿y ustedes?


@CPuenteMaderaAB



Artículo publicado en tualbacete.com





lunes, 28 de octubre de 2013

¡TILA PARA EL PEPÉ!

Los gobernantes peperos están francamente nerviosos.  Seguramente no esperaban la comprensión de sus políticas por parte de la mayoría de los españoles, pero sí al menos del 30% que en su día les votó. Y nada, ni eso. Así, el desencanto y la indignación que van generando el resultado de sus políticas, no es sino la mecha para la crispación que de manera concreta genera cada uno y una de sus cargos.

Cuando en una comunidad de vecinos, una familia de esas que en la vida no ha hecho otra cosa que trabajar y ahora se ven arruinados y sin posibilidades de pagar la comunidad, se genera crispación. Cuando otras personas necesitan del parcheo de la caridad para poder comer, cuando algunos padres se acuestan sin cenar para que sus hijos tengan (cuando es posible) algo que llevarse a la boca, genera crispación. Cuando del bolsillo de todos los ciudadanos y ciudadanas se nos ha robado dinero para regalárselo a los bancos, que en esta misma semana presumen de ganancias millonarias, eso, genera crispación. Pero cuando el joven cuadro, que por toda formación y mérito tiene ser hijo o hija de fulanito o fulanita, entra en delicadas reuniones como elefante en cacharrería, tratando como a delincuentes a quienes allí están porque es lo único que han mamado en casa desde su uso (o desuso) de razón, también crispa. No lo ven, ya lo dijimos en “toneladas de naranjas mecánicas”. Es imposible que los globos comprados con miles de euros para los hijos de la Sra. Mato, dejen ver a los primeros niños que tras largas décadas están viviendo en territorio español sin ser debidamente vacunados. Cuando en las familias se ve cómo se pretende poner en marcha una ley que va a restar infinitas posibilidades de que los hijos y las hijas tengan una educación de calidad, se genera crispación. Cuando hay jóvenes que no son los suyos, que no cargan de gomina ni educación privada, cuando les da por salir a la calle y defender lo público; contestan, nerviosos y crispando, como cualquier fascismo: enviando a sus fuerzas para que los intimiden.

Lo mismo lo que en el pepé necesitan ¡es tila! Tazas de tila, litros de tila, sueros en vena de tila… y con un poco de suerte, hasta se relajan unos minutos, dejan de crispar, de recortar y nos permiten vivir en paz.



 @CPuenteMaderaAB




 Artículo publicado en diarioAB.com, en la columna de opinión "BROTES ROJOS"



lunes, 21 de octubre de 2013

UN VAGÓN DE NARANJAS MECÁNICAS


Recientemente un diputado de UPN ha propuesto en el Congreso que las mujeres que decidan interrumpir su embarazo sean obligadas a ver la ecografía de un feto, alegando que “una imagen vale más que mil palabras”. Como esto último suele ser cierto, podría empezar por él mismo. Podría contemplar, por ejemplo, unas cuantas fotos de chicas fallecidas en clínicas clandestinas por culpa de las legislaciones prohibicionistas que él y los suyos defienden. Incluso podría hacerse un póster y ponérselo en el salón de su casa.
No, si a lo mejor no es tan mala idea la de este piadoso varón. A lo mejor Ana Mato se detenía a pensar un momento si fuese obligada a ver, una por una, las 873.000 tarjetas sanitarias de inmigrantes dadas de baja por su Ministerio. Y no estaría mal que viese sus rostros, el de cada una de esas personas que sufre sus enfermedades en silencio, que padece el dolor calladamente, que se consume como una llama ante la saña de las autoridades sanitarias y la indiferencia de la mayoría. No, desde luego que no estaría mal que la Ministra de Sanidad hubiese podido mirar a los ojos a Alpha Pam, el joven senegalés que murió de tuberculosis en Mallorca por carecer de cobertura sanitaria.
Posiblemente algunas cosas cambiasen si obligásemos a los dueños del mundo a mirar a la gente a la cara. ¿Sería capaz el inefable Botín de repetir lo de que “es un momento fantástico para España, llega dinero de todas partes”, ante la mirada de una madre que no tiene con qué llenar el bocadillo de sus hijos? ¿Seguiría pronunciando las mismas insultantes estupideces tras haber visto las fotos de los más de tres millones de personas que en nuestro país padecen pobreza severa, es decir, que sobreviven con menos de 307 euros al mes? 307 euros al mes: menos de lo que seguramente algunos ricachones gastan en comida para el perro.

Y puestos a imaginar, por qué no suponer que un día podemos amarrar a ciertos personajes a un sillón y aplicarles un mecanismo que les impida cerrar los ojos, como en la célebre película de Stanley Kubrick. Así, los responsables de nuestro sistema bancario podrían deleitarse con las imágenes de los desalojos de las familias desahuciadas, y ver cómo la gente se aferra, con una desesperación que quizá les parezca cómica, a las ventanas, a las paredes, a las puertas… de lo que hasta entonces había sido su hogar mientras la policía los arrastra como si fueran bestias; también verían los gestos de estupefacción e incomprensión de los ancianos, las viudas, los niños a los que estafaron con las preferentes. Fátima Báñez podría conocer los rostros de los cientos de miles de parados generados por su simpática reforma laboral, con la colaboración estelar de la Virgen del Rocío. El ministro Wert podría examinar en persona a los miles de científicos expulsados de sus laboratorios, a los 50.000 profesores despedidos, a los incontables estudiantes que abandonarán la universidad por perder la beca… ¡Son tantos los que deberían someterse al tratamiento tipo La naranja mecánica que sugiere el ilustre diputado de UPN! Rajoy y Cospedal, como máximos responsables de los destinos del país, tendrían que estar presentes en todas las sesiones. El problema es que España no necesita ni una, ni dos, ni tres, sino todo un vagón de naranjas mecánicas.


@CPuenteMaderaAB


Artículo publicado en tualbacete.com

lunes, 14 de octubre de 2013

PROHIBICIONES QUE NOS FORTALECEN

Los que ahora mandan son quienes son y provienen de donde provienen. Son demócratas accidentales. Conviven con las libertades y los derechos porque no tienen más remedio, pero su hábitat natural es la jerarquía, el autoritarismo y la represión. Por eso, ante la más mínima disidencia, no dudan en utilizar  los cuerpos de seguridad del estado como si fuesen su guardia pretoriana y la de su particular régimen, igual que hizo durante 40 años el dictador que ni nombramos por no mancharnos la boca. Buena prueba de ello es que, una vez más, y ya es la enésima, la Subdelegación del Gobierno ha vuelto a sancionar a un grupo de ciudadanos que, durante la pasada feria, expresó públicamente su preocupación por los recortes en dependencia. Nadie les pidió la documentación, nadie los identificó, o sea que, una vez más, y ya es la enésima, la Subdelegación tiró de sus siniestras listas negras.

            En la misma línea, la Consejería de Educación procedió recientemente a prohibir la celebración en el interior de los centros de la Consulta Ciudadana por la Educación convocada por la Plataforma Estatal por la Escuela Pública. Dicha plataforma está integrada por asociaciones de madres y padres, sindicatos y asambleas de estudiantes, es decir, por organizaciones legales con pleno derecho a utilizar las instalaciones públicas como lugar de encuentro y espacio de información, tal y como establece el artículo 8 de la Ley 8/1995 Reguladora del Derecho a la Educación cuando afirma que Se garantiza en los centros docentes el derecho de reunión de los profesores, personal de administración y de servicios, padres de alumnos y alumnos (…)”.  Pues bien, MM, confundiendo Castilla-La Mancha con un coto privado, cosa que tampoco nos extraña, deroga de facto la ley vigente e implanta el toque de queda porque, desgraciadamente, en algunos sectores siempre se le ha tenido mucho miedo a la libertad.

            Pero lo que el consejero no podía sospechar es que esa decisión despótica iba a dar alas a la convocatoria. Algo que podía haber quedado circunscrito al anonimato de los pasillos de escuelas e institutos se convirtió en una vistosa expresión callejera de apoyo a la educación pública. Miles de personas se han acercado a las innumerables mesas instaladas por toda la ciudad no solo para mostrar su rechazo a los recortes y a la LOMCE, sino también para informarse, para dialogar, para dar su aliento, para ofrecer su colaboración. Y sí, es cierto, esporádicamente los voluntarios han tenido que soportar los malos modos o las bravuconadas de algunos cabestros, pero, en fin, ya se sabe que las tiranías se sostienen en la mansedumbre de los indiferentes y el servilismo de una minoría de aduladores.

            A los demás, a la inmensa mayoría, la censura, la represión y las prohibiciones nos curten, nos fortalecen y nos proporcionan energía para seguir luchando. Estos torquemaditas no nos van a callar.


            Nos vemos en la huelga del 24.  


@CPuenteMaderaAB



Artículo publicado en diarioAB.com, en la columna de opinión "BROTES ROJOS"

lunes, 7 de octubre de 2013

El funcionario 30-30-30-100


Afirmar en público que los policías municipales son unos chulos vestidos de chulos…  deslizar sonriendo que las niñas deben vestir falda…  acusar a unos artistas de cobrar millones de la SGAE y ser incapaz de dar uno solo de sus nombres… tachar de nazis a los médicos de los servicios de cuidados paliativos… justificar los sobresueldos en el PP… berrear obsesivamente que el 30% de los funcionarios falta cada día a trabajar y que hay que despedir al 30% y que hay  que bajarles el sueldo un 30% y que el 100% no está en su puesto de trabajo al inicio de la jornada… ¿quieren más? Busquen y encontrarán, busquen declaraciones de Miguel Ángel Rodríguez (M.A.R.), el responsable de comunicación del PP y secretario de estado de comunicación con Aznar… y cuya empresa CARAT ha recibido millones de euros en contratos de la Comunidad de Madrid gobernada por Esperanza Aguirre.

Sigamos: este sujeto, al amparo de la impunidad que le brindan algunos medios de comunicación, salta de tertulia en tertulia insultando e interrumpiendo con sus bramidos a los ciudadanos que llaman indignados por sus fanfarronerías… es uno de los ejemplos típicos de esos contertulios de la derecha cavernícola que inundan la “opinión”  intentando convencer a la parroquia de que lo suyo son argumentos, no extremismo ideológico expresado frecuentemente con la más soez de las formas.

Una de sus camaradas, Curri Valenzuela, contó en Radio Nacional que su fuente de información sobre el origen histórico del problema catalán (allá por Felipe V) era wikipedia. Y con eso debajo del brazo y mucha falta de respeto, van saltando estos personajes de tertulia en tertulia como “analistas políticos”. Ni siquiera tienen el decoro de cubrir su ignorancia con la prudencia en las formas, sino que suelen gritar, insultar, jalearse y reírse… justo antes del corte publicitario en el que se anuncia la venta de los dispositivos que detectan los radares de la Guardia Civil… “para que no le metan a usted la mano en el bolsillo”. Patético.

Ante gente como M.A.R. caben varias respuestas: la primera, indignarse y contestar con desprecio y una mínima dosis de educación; la segunda, descuajaringarse de risa ante tan esperpéntico sujeto y ridiculizarlo hasta el infinito dejándole hablar (reproduciendo sus entrevistas, declaraciones, escritos…). Eso es lo que hizo esta semana el genial Gran Wyoming (G.W.). La edición del programa “El Intermedio” que le dedicó el pasado miércoles fue memorable. Podemos imaginar que M.A.R., estando como está reñido con la inteligencia, habrá pasado del verde al morado al visionar el programa, y que espumajeará su desprecio a Wyoming en todas las tertulias a las que acuda (cobrando como “analista político”, eso sí).

Son ambos, M.A.R. y G.W., dos tipos muy peligrosos, aunque el segundo lo es mucho más. Entre un M.A.R. tan previsible como un toro y tan absurdamente vanidoso como para pavonearse de que los sindicatos “le montaron” una huelga general… ¡a él!... y un G.W. tan absolutamente inteligente como para reírse con elegancia y chispa de él mismo y de todo lo que se menea, créannos, no hay color. Pero además hoy para muchísimos españoles G.W. es un héroe. Porque, como cantaba el grupo de rock Asfalto en su “Capitán Trueno”, si Wyoming no es capaz de hacer que gane el bueno, por lo menos deja a los malos arrastrándose por los suelos rugiendo de rabia, y eso es algo, en estos tiempos, impagable.

Gracias, Miguel Ángel, por hacer posible a Wyoming.


@CPuenteMaderaAB


Artículo publicado en tualbacete.com

lunes, 30 de septiembre de 2013

LA UNI P.P.ERSIDAD


Brotes  Rojos*
Los pecados a redimir son muchos. Viejos, recientes, presentes y futuros. Y como un paseo bajo peineta no da para cumplir, tal vez fuera por eso que Dª Dolores prefirió al repartir su tiempo, dedicarlo a implorar a la virgen de los Llanos, antes  que acudir a la inauguración del año Académico de la UCLM. Llegó el momento y a quien le encargó el discurso debió de decirle… “¿y yo qué pongo? Porque felicitarnos por aniquilar la educación pública queda bien para los discursos internos, pero parece inapropiado en el discurso de inauguración de una universidad pública…” Así que decidió dar la espantá y le pasó la bola a D. Marcial, que debió intuir que no sería recibido con vítores de ¡eres el más grande! ni pasodoble alguno, y decidió entrar y salir ¡¡por la puerta de atrás!! Entre ambas cosas, unos balbuceos y un continuo ¡yestocuándoseacabatierratragamé! Y lo más escandaloso e indignante: ¡la policía en la universidad! No se había visto desde Franco algo similar. Nuevamente intimidando a los jóvenes, que en buena medida además eran representantes legítimos y pasaban por la puerta principal, sin esconderse. Alguien debería dar cuentas sobre esa presencia: Mal quien la dictara y peor quien la consintiera.
 
Si en su día el PSOE regional acabó repartiendo estudios y centros por la región como quien reparte la baraja, Atila debía ser un Leonardo al lado de nuestros gobernantes regionales actuales. Lo que se está haciendo con la investigación no tiene nombre, y eso que desde la UCLM se va haciendo todo lo que buenamente se puede y más, pero el impago por parte de la Junta de proyectos ya aprobados y evaluados, el retraso en la salida de los proyectos nacionales, etc., está asfixiando y tirando por tierra lo hecho. La información que tras años se ha podido obtener con animales tendrá que ser cedida a otras universidades por falta de alimento para éstos; y las células con las que se han venido investigando durante años y años deberán igualmente ser regaladas a otros proyectos al no poder ser mantenidas. Proyectos técnicos paralizados porque no llegan a la universidad los fondos prometidos y necesarios para la compra de los materiales requeridos.
 Con los jóvenes que se formaban en investigación en la calle y los formados fichados en el extranjero. No es que ya no se vaya a poder hacer casi nada en el futuro, es que se está arrojando a la basura el resultado de largos años de trabajos, algunos de ellos conjuntos con prestigiosas universidades extranjeras. En docencia, ya adelantamos en su día que un “Plan Bolonia”, una “revolución educativa” a “coste cero”, iba a ser complicada. Hoy, “a coste menos varios millones”, pueden imaginar. Más cursos, más estudios, más grupos, más implicación… sin cubrir bajas, jubilaciones y con la máquina de segar profesores asociados puesta día y noche por la Junta, solo puede traer lo que trae. También desde la propia UCLM se deberá tener claro cómo repartir la miseria: si ganar en catedráticos con incomprensibles criterios “estratégicos”, o en las áreas que realmente más se necesitan, así como en la consolidación de los docentes formados como contratados y ayudantes.  No solamente los problemas afectan a la docencia estricta, las labores del personal de administración y servicios (PAS) se hacen cada día más complejas y difíciles de cubrir, tampoco ellos y ellas han podido escapar de esta locura. Las políticas de castigo a lo público para beneficio de los amigos dueños de lo privado no tienen piedad, y la formación de nuestros y nuestras jóvenes, puede mantener un mínimo nivel de calidad gracias al empeño, extraordinario en la mayoría de las ocasiones, de los trabajadores de la UCLM. Si bien acabará por ser insuficiente si no hay cambios sustanciales de políticas. A buen seguro que la curia, rendida a las flores y servicios prestados por Dª Dolores, le ha perdonado todos sus pecados; a la buena gente de Catilla-La Mancha le va a ser bastante más difícil hacerlo.
 
@CPuenteMaderaAB

 
(*) Artículo publicado en la sección de opinión de diarioab.com