"Amamos
las catedrales antiguas, los muebles antiguos, las pinturas antiguas y
los viejos libros, pero nos hemos olvidado por completo del enorme valor
moral y espiritual de los ancianos" LIN YUTANG
Vivimos
agobiados por multitud de problemas, el individualismo está siendo cada
vez más, por desgracia, la seña de identidad de nuestras actuaciones y
nos estamos olvidando de algo esencial como es el respeto y cuidado de
las personas mayores. Nuestras yayas, nuestros abuelos están aquí junto a
nosotros, dándonos, en la gran mayoría de los casos, un ejemplo de
vida; gracias a su impagable lucha y sacrificio silencioso hemos logrado
avances sociales en España y particularmente en Castilla-La Mancha.
No
debemos permitir que las personas mayores sean marginadas e incluso
ignoradas. Las prisas, el estrés y los valores materiales que manejan
nuestras acciones, no pueden justificar que nuestros yayos sean
considerados como personas inútiles. Se equivocan los que así los
consideran, pues la vida no se reduce a saber utilizar la alta
tecnología o programas de whatsapp,
ni a tener éxito en ganar dinero, la vida es la interacción del ser
humano con otras personas y con el mundo que lo rodea. En este terreno
todavía hay mucho por aprender de los mayores. Podrán cambiar los
códigos, pero la amistad sigue siendo la misma dentro de cualquier
generación. Podrán
cambiar las leyes de educación, pero los temores ante un examen o los
problemas con los compañeros de colegio son casi los mismos que tuvieron
nuestros abuelos. No nos confundamos, todavía tenemos que aprender
mucho de nuestras yayas y de nuestros yayos.
Para
nosotros son un referente, un modelo a seguir, personas que tienen que
ser mimadas por los poderes públicos. La Constitución española, en sus
artículos 42 y 43, les reconoce la protección a la salud y unas
pensiones dignas. Las administraciones públicas están obligadas a
promover su bienestar mediante un sistema de servicios sociales que
atienda sus problemas específicos de salud, vivienda, cultura y ocio,
sin perjuicio de las obligaciones familiares.
Las
leyes están para cumplirse y los políticos de la Junta de Comunidades
de Castilla La Mancha se olvidan, sin pudor, de sus obligaciones.
Cospedal y el consejero Echaniz –sí, el que equiparaba sin rubor el
repago de los medicamentos de nuestros jubilados con los cuatro cafés-,
con sus políticas de recortes en la atención a los mayores en nuestra
región, van a provocar la pérdida de entre 1500 y 2000 empleos en el
sector y un gravísimo deterioro de la calidad asistencial.
En Albacete tenemos un ejemplo de recortes injustificados en la atención a nuestros mayores. Es el que se quiere aplicar en la Residencia del Paseo de la Cuba. La Consejería de Sanidad quiere realizar una reducción de plantilla eliminando más de veinte puestos de trabajo en los servicios de Auxiliares Sanitarios, Terapia ocupacional, Animación Socio-cultural y otras secciones de esta Residencia y en el Servicio de Estancias Diurnas, del citado centro asistencial público.
Es una injustificada decisión pues las personas mayores, un sector tan sensible, necesitado de servicios y atenciones, van a resultar gravemente perjudicadas con la eliminación de tantos profesionales imprescindibles. Llueve sobre mojado en el Paseo de la Cuba, pues en los últimos meses ya ha habido incumplimientos de la Junta para el pago de los salarios al personal de limpieza y algunas auxiliares que ya no prestan sus servicios. El señor consejero cafetero debe rectificar manteniendo todos los puestos de trabajo que se tienen actualmente en esta Residencia y al mismo tiempo debe reponer todos los que en los últimos meses se han suprimido, dado que estos profesionales son los únicos que garantizan un servicio público de calidad al que tienen derecho nuestras personas mayores. No queremos almacenes de abuelos.
![]() |
Fuente: Diario "El Pueblo de Albacete" |
En Albacete tenemos un ejemplo de recortes injustificados en la atención a nuestros mayores. Es el que se quiere aplicar en la Residencia del Paseo de la Cuba. La Consejería de Sanidad quiere realizar una reducción de plantilla eliminando más de veinte puestos de trabajo en los servicios de Auxiliares Sanitarios, Terapia ocupacional, Animación Socio-cultural y otras secciones de esta Residencia y en el Servicio de Estancias Diurnas, del citado centro asistencial público.
Es una injustificada decisión pues las personas mayores, un sector tan sensible, necesitado de servicios y atenciones, van a resultar gravemente perjudicadas con la eliminación de tantos profesionales imprescindibles. Llueve sobre mojado en el Paseo de la Cuba, pues en los últimos meses ya ha habido incumplimientos de la Junta para el pago de los salarios al personal de limpieza y algunas auxiliares que ya no prestan sus servicios. El señor consejero cafetero debe rectificar manteniendo todos los puestos de trabajo que se tienen actualmente en esta Residencia y al mismo tiempo debe reponer todos los que en los últimos meses se han suprimido, dado que estos profesionales son los únicos que garantizan un servicio público de calidad al que tienen derecho nuestras personas mayores. No queremos almacenes de abuelos.