El PPP y el estacazo y tente tieso

Artículo publicado en el diario La Verdad (Edición Albacete). 05/04/2012

Hace justo una semana, se desarrolló en el Estado Español la 8ª Huelga General desde el regreso de la Democracia. Una reforma Laboral injusta e inútil, es la responsable. El Gobierno del PPP, no se quiere enterar (no, lo de la triple P no es una errata, es como ya mucha gente llama a esa fusión del Partido Popular con la Patronal, y viceversa, que no se sabe bien quién decide primero).

Decían que había sido un rotundo fracaso, pero las manifestaciones en las calles estaban llenas; decían que “había absoluta normalidad” pero al tiempo se les escapa el deseo de que pasara ya por fin ese día y todo “volviera a la normalidad”. Un espectáculo. Era curioso escucharles hablar de normalidad en los servicios mínimos. Cuando se incumplen, todo son vituperios hacia los trabajadores, cuando se cumplen se pretende vender como un éxito del gobierno, ¿en qué quedamos?

Sin duda, comentario aparte merece el caso de Albacete. Ese día tocaba por protocolo realizar el Pleno Municipal. Es sabido que los y las concejales del Partido Popular no harían huelga, esto es lógico pues se trataba de una propuesta contra una Ley de su partido. Pero en general, se han instalado en que con una mayoría absoluta todo vale y se pueden olvidar de los millones de ciudadanos que no los votaron, y eso es un error.

El Pleno Municipal podría haberse cambiado de día, y la única lectura posible habría sido que el gobierno municipal tiene sensibilidad, y que a pesar de la mayoría absoluta que les permite sacar todo cuanto deseen para adelante cuando y como sea, respetan a los miles de albaceteños y albaceteñas que andaban en la calle, al tiempo que evitaban escenas extraordinariamente desagradables.

La misma tarde de antes, algunos profesionales empleados laborales fijos de Ayuntamiento, que llevan trabajando en algunos casos más de 20 años, recibían la noticia de casi con absoluta seguridad se irían a la calle. ¿Cómo piensa el gobierno del PP que estaban los ánimos? Desde las brutalidades de M Ángel Blanco y la Guerra de Irak, nunca el Altozano se vio tan desbordado. Pero todo eso les era ajeno, el Pleno se celebraría porque tienen mayoría y punto.

Y cuando la gente se fue a protestar por lo que está siendo una despiadada estrategia por parte del PPP de espérate que primero legislo, allano el terreno y ahora despedimos ya tranquilamente; por todos los compañeros y compañeras que se están yendo a la calle, por cómo quienes han originado toda este crisis siguen hinchándose a millones mientras se demoniza a los demás, pues aún les esperaba la guinda del pastel.

La respuesta policial, en este tipo de casos y siempre, dice la ley que debe ser proporcional a los hechos. Albacete es aún muy pequeño y nos conocemos todos. Los palos que se empezaron a repartir los recibieron personas que exclusivamente se estaban manifestando en lo que es la casa de toda la ciudadanía, el Ayuntamiento, pero las instrucciones parecían muy claritas. No ejercieron violencia, no llevaban ningún tipo de objetos, no rompían nada… pero los palos les empezaron a caer a los de la cara descubierta. Así le cayó uno en la cabeza al currante de la metalurgia, que hace posible que su empresario tenga lo mucho que tiene; otros varios al amable jubilado de banca, el que montaba conciertos y se ha pisoteado empresa por empresa tantas navidades recolectando juguetes para quienes más lo necesitaban y al que aún le sigue preocupando el futuro de todos los demás; el querido neumólogo, adorado por sus pacientes, el preocupado autónomo que ve cómo su caja baja cada día más porque si los demás no tienen, él tampoco, la joven estudiante que sabe que si algún día trabaja lo hará en condiciones de esclavismo,  el jubilado de una Asociación de Vecinos, el obrero de la construcción que sabe que ha hecho de oro a quien ahora pretende hacerle cargar con la crisis, etc, etc. Éste venía a ser el peligrosísimo perfil de la radical banda de desestabilizadores. Éstos fueron los que recibieron una incomprensible mano de estacazos. El problema de esto, ya lo sabe el PPP por lo que ha ocurrido en cercanas ciudades, es que anima a más gente. Un tentetieso, así, todo junto, es un muñeco que cuando se intenta tumbar se vuelve a poner de pie. Pero cuando hablamos de que tras un estacazo llega un tente tieso, separado, hablamos ya de personas, capaces de pensar, de rebelarse y ponerse una y mil veces de pie por sus derechos y los de toda la ciudadanía. No lo olviden.